Día de la Salud Menstrual: La menstruación no se detiene durante los desastres

Dr Julia Klock, who has been working as a medical volunteer for the Brazilian Red Cross during the floods in southern Brazil, talks with two girls from the indigenous community of Goj Kusug in the municipality of Capela de Santana, Rio Grande do Sul, Brazil.

La Dra. Julia Klock, que ha estado trabajando como voluntaria médica para la Cruz Roja Brasileña durante las inundaciones en el sur de Brasil, habla con dos niñas de la comunidad indígena de Goj Kusug en el municipio de Capela de Santana, Rio Grande do Sul, Brasil.

Foto: Alejandro Bravo/ IFRC

Cuando ocurre un desastre, parte de nuestro trabajo consiste en garantizar que todas las personas que lo necesiten -niñas, mujeres, personas no binarias y hombres trans- tengan acceso a recursos seguros para gestionar su salud menstrual durante las emergencias.

Cuando las fuertes lluvias provocaron inundaciones masivas en el estado de Rio Grande do Sul, en el sur de Brasil, en mayo, la vida normal de 2,3 millones de personas se paralizó. Desde entonces, la lluvia no ha cesado, y las necesidades han crecido exponencialmente. Más de 80.000 personas permanecen en refugios temporales y necesitan ayuda urgente.

Mientras los daños en la infrastructura paralizan las cadenas de suministro y dificultan el acceso a los artículos de primera necesidad, no interrumpen el ciclo menstrual de la mitad de las personas afectadas por las inundaciones. 

“Uno de los problemas a los que nos enfrentamos en la atención de la emergencia por las inundaciones en Brasil, es la dificultad de acceder a productos de higiene y salud menstrual”, reportó la Dra. Julia Klock, médica que pausó su trabajo habitual para colaborar como voluntaria con la Cruz Roja Brasileña durante las inundaciones. 

Aunque la menstruación es tan natural como comer o dormir, con demasiada frecuencia la gente se resiste a hablar de la falta de productos esenciales para la salud menstrual porque a veces este tema se considera embarazoso o incómodo, algo que hay que ocultar. "En muchas comunidades, este tema sigue siendo tabú", señala la Dra. Klock.   

Este año, el Día Mundial de la Menstruación aboga por un #MundoRespetuosoConLaMenstruación, con el fin de normalizar plenamente la menstruación y hacer que estos tabúes pasen a la historia. 

Para ayudarnos a desentrañar este tema, le pedimos a Katherine Fuentes, coordinadora de protección, género e inclusión de la IFRC en las Américas, que nos dijera cuáles son los principales temas de los que se debería hablar cuando se trata de salud menstrual durante y después de un desastre. 

Tras las inundaciones que afectaron a comunidades enteras en el sur de Brasil, la IFRC distribuyó kits de higiene que incluían toallas sanitarias para ayudar a satisfacer las necesidades de salud e higiene de la comunidad.

Tras las inundaciones que afectaron a comunidades enteras en el sur de Brasil, la IFRC distribuyó kits de higiene que incluían toallas sanitarias para ayudar a satisfacer las necesidades de salud e higiene de la comunidad.

Foto: Alejandro Bravo/ IFRC

  1. Acceso a productos de higiene menstrual.   

Cuando ocurre un desastre, como las recientes inundaciones en Brasil, el acceso a productos menstruales se vuelve más difícil.  

Por eso los artículos de emergencia que distribuimos incluyen productos de higiene menstrual, considerando cuántas personas en edades menstruantes se han visto afectadas por el desastre. 

Estos productos de higiene pueden ir desde compresas, tampones, y copas menstruales, hasta calzones menstruales, compresas de tela, baldes para la higiene, entre otros. 

  1. Instalaciones limpias, seguras y privadas: 

Procuramos que las personas que están menstruando tengan acceso a agua potable, baños limpios y espacios privados para cambiarse y desechar los residuos de forma adecuada e informada.     

Voluntarios de la Cruz Roja Brasileña entregan cajas de artículos de emergencia a la comunidad indígena de Goj Kusug en Rio Grande do Sul, Brasil, una comunidad afectada indirectamente por las inundaciones.

Voluntarios de la Cruz Roja Brasileña entregan cajas de artículos de emergencia a la comunidad indígena de Goj Kusug en Rio Grande do Sul, Brasil, una comunidad afectada indirectamente por las inundaciones.

Foto: Alejandro Bravo/ IFRC

  1. Educación y sensibilización 

Trabajamos para que las personas se informen sobre el ciclo menstrual, que sepan cómo manejar su higiene menstrual en condiciones difíciles, dónde acceder a los productos y cómo desecharlos.  

Para asegurar la salud menstrual, es clave la participación de toda la comunidad, incluyendo a los niños y los hombres. Conocer sobre el ciclo menstrual ayuda a reducir el estigma, promueve el acompañamiento colectivo, y ayuda a cuidar la salud y promover el bienestar. 

Algunas acciones en esta área son encuentros grupales y procesos de consulta para conocer las necesidades específicas de las personas menstruantes.  

  1. Apoyo psicosocial 

Es posible que durante las emergencias la menstruación sea estigmatizada, por eso es necesario brindar apoyo psicosocial y crear un entorno donde las personas puedan hablar abiertamente, sin tabúes, con un enfoque de Protección, Género e Inclusión que considere las necesidades individuales de cada persona. 

Para brindar una atención adecuada, debemos preguntarnos cuáles estereotipos y roles de género están presentes, cuáles son las ideas y prácticas en la comunidad sobre la higiene menstrual y cómo nuestros programas de asistencia humanitaria pueden atender las necesidades de las personas que menstrúan".  

Para más información, consulte los siguientes enlaces a las guías y herramientas de la IFRC para la gestión de la salud menstrual de las personas afectadas por emergencias y desastres.  

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